El director español Pedro Solís, nacido en Barcelona y residente en Guadalajara, reveló que el cortometraje está inspirado en sus hijos, Alejandra y Nicolás. A ellos y a su esposa Lola, dedicó el premio que recibió.
El Ministerio de Cultura ha recomendado el corto por su vocación educativa. «Eso fue para mí el primer premio que recibe el corto, porque esto no lo consiguen todas las obras», recalca su director que además comenta orgulloso al respecto: "Hay mucho interés por parte de profesores para enseñar el trabajo en los colegios, y esto es importante para mí, porque es aportar un granito de arena para ayudar a que los niños integren más a aquellos que necesitan una educación especial".
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